¿Quién fue Andy Warhol?
Andrew Warhola (6 de agosto de 1928-22 de febrero de
1987) o mejor conocido como Andy Warhol, fue hijo de inmigrantes eslovacos
instalados en Pittsburg. Warhol decidió mudarse a Nueva York y dedicarse al
arte, más específicamente a la ilustración comercial. Desde muy pequeño quiso
ser famoso y con ese objetivo en la mente hizo todo hasta lograrlo. A veces, se
comenta que las personas tienen sus “10 segundos de fama”, pues para Warhol,
esos diez segundos de fama le duraron décadas.
"...Hemos llegado a la conclusión de
que los más banales e incluso vulgares elementos de la civilización moderna
pueden, al transportarse al lienzo, convertirse en Arte..."
Andy
Warhol.
La cultura popular fabrica sus propios iconos
estéticos y Andy fue de los primeros no sólo en verlos como arte, sino en
fabricarlos en masa, comercializarlos, como si de un producto más de consumo se
tratara. De hecho, para Warhol el arte era un juego, por eso mismo debería
estar al alcance de todos, no sólo de unos cuantos eruditos.
Andy refinó su aspecto y se fue construyendo a sí
mismo. Se estaba quedando calvo, así que empezó a llevar pelucas que más tarde
formarían parte de él y se volverían famosas. Warhol estuvo rodeado de
personajes extravagantes de Nueva York y alquiló un almacén (The Factory) que
le sirvió de taller y estaba lleno las veinticuatro horas de adictos a las
anfetaminas, transexuales y grupos de rock llevados por el propio Warhol (La
Velvet Underground).
Andy Warhol no solo incursionó en el arte, sino
también en el dibujo, la pintura, serigrafía, escultura, música, cine,
televisión, moda, performance,
teatro, fotografía e incluso arte digital. Sin duda alguna, era un artista íntegro
desde dónde se le quisiera ver, además, nunca dejó de buscar la forma de
sobresalir y hacer las cosas de forma distinta a las establecidas.
Muchas de las cosas que vemos y consideramos arte en
nuestra época han sido gracias a la influencia que tuvo Andy Warhol en su momento.
Llegados a este punto, el arte ya no imita la vida, sino que es la vida que
imita el arte. Nuestra cultura es superficial, es inexpresiva e impersonal. Es
repetitiva y saturante. Es casi una religión con todos los logos, las
celebridades y los productos de consumo que de una u otra forma se vuelven
anestésicos que nos hacen olvidar todos aquellos problemas que nos rodean.
Mauricio Manriquez
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